CRIMINAL

CRIMINAL. ÁNGELES BELLOS, BÁRBAROS TATUADOS. EL TATUAJE EN ESPAÑA (1888-1993)

Editorial:
FELGUERA EDITORES
Año de edición:
Materia
Arte
ISBN:
978-84-124669-3-5
Páginas:
260
Encuadernación:
Cartoné
Disponibilidad:
Disponible en 1 semana
Colección:
TRUE CRIME

Descuento:

-5%

Antes:

24,90 €

Despues:

23,66 €
Comprar

Edición de Servando Rocha. Hubo un tiempo, no hace mucho, en que el tatuaje estaba reservado a una tropa formada por criminales, apaches, presidiarios, legionarios, prostitutas, anarquistas o marineros. Aunque también se puso de moda entre la realeza europea o exhibía en circos y espectáculos de fenómenos. Su uso, un código secreto en manos de fueras de la ley, despertó la fascinación e interés de numerosos antropólogos, criminólogos y médicos que, siguiendo las ideas del italiano Cesare Lombroso -padre de la antropología criminal-, veían en el tatuaje un signo de atavismo y predisposición a la locura, violencia y asesinato, y los tatuados rarezas y seres misteriosos.
En España, desde que en 1888 Rafael Salillas, nuestro «pequeño Lombroso», mostrase su colección de tatuajes de delincuentes patrios, los tatuados, que fueron fotografiados y estudiados, sembraron el terror y desconcierto: oleadas de apaches con el cuerpo cubierto de dibujos obscenos y llamadas a la venganza, llegaban a ciudades como Madrid, Barcelona o Bilbao, entre otras, al tiempo que defendían la bohemia más hampona. Más tarde, milicianos